Oasiz, el mayor centro comercial de Madrid, afronta una demanda millonaria de su gestor por su despido
Cuatro meses después de su flamante apertura, Oasiz, el mayor centro comercial de Madrid, situado en la localidad de Torrejón de Ardoz, afronta demandas del que fuera su gestor, la firma española New Asset Management (NAM), que reclama honorarios que asegura no han sido pagados, por un importe superior a los seis millones de euros.
Oasiz, un macro complejo de 280.000 metros cuadrados al aire libre, con más de un centenar de establecimientos, dos lagos y una playa artificial, propiedad del grupo francés Compagnie de Phalsbourg, abrió sus puertas el pasado 2 de diciembre, tras una inversión cercana a los 200 millones de euros.
En la inauguración del centro comercial pasó desapercibida la presencia de Manuel Saavedra, al frente de la gestora NAM. Saavedra fue contratado en 2015 por Compañía de Phalsbourg (la filial española de la matriz francesa) para desarrollar el proyecto.
El empresario español asegura que el contrato firmado no ha sido respetado por el grupo francés, y se presentó en el acto de apertura de Oasiz, acompañado de notario, para reclamar honorarios debidos. La propiedad del centro les instó a abandonarlo a los pocos minutos.
Dos meses después, el pasado 22 de febrero, NAM -representada por el abogado Rubén Montoya, del despacho Dfive Legal Partner- presentó demanda solicitando una indemnización de 5,2 millones de euros más intereses. La demanda ha recaído en el Juzgado de Primera Instancia número tres de Madrid.
La gestora de Manuel Saavedra relata en su demanda que fue contratada por Compañía de Phalsbourg en febrero de 2015.
La contratación se realizó a través de las filiales Carlotta Iberica, para conseguir los terrenos y gestión del centro Oasiz, y de Allison Iberica, para la construcción de un centro outlet también en Torrejón de Ardoz, que todavía no se ha llevado a cabo.
NAM asegura que, durante cinco años, el contrato de prestación de servicios se desarrolló sin incidencias, hasta que en febrero de 2020 las dos sociedades dependientes de Compañía de Phalsbourg dejaron de pagar los honorarios fijos mensuales pactados en el contrato.
La cláusula séptima
En diciembre de 2021 la gestora de Manuel Saavedra recibió un burofax de las filiales españolas de Compañía de Phalsbourg en el que se comunicaba el desistimiento unilateral del contrato.
La firma española defiende su reclamación aludiendo a la cláusula séptima del contrato de prestación de servicios, según la cual la propiedad del centro comercial se reserva la facultad de resolver el contrato en cualquier momento. Pero siempre abonando a la gestora el 100% de los honorarios pactados hasta la terminación del contrato.
La gestora acompaña su demanda de un informe pericial económico para justificar el importe reclamado. La empresa española presentó con anterioridad otras reclamaciones menores, que sumadas a la presentada el pasado mes de febrero resultan en total 6,2 millones de euros.
Los honorarios pactados responden a un porcentaje acordado sobre las rentas brutas facturadas, y también sobre el presupuesto de gastos del centro de los dos primeros años de funcionamiento del centro comercial.
Fuentes cercanas al despacho que representa al grupo francés, han indicado a este diario que existen «diferentes procedimientos judiciales iniciados, alguno de ellos archivado y otros que están Sub iudice».
También han señalado las mismas fuentes que la reclamación judicial de los 5,2 millones de euros todavía no les ha sido notificado.
«Existen serias discrepancias sobre los servicios prestados por parte del demandante», han añadido, y han advertido que estas «serán objeto de una más que probable ulterior reclamación, sin perjuicio de que se amplíe por los posibles daños a los derechos de imagen» de su cliente.
Compagnie de Phalsbourg fue fundada en 1989 por Philippe Journo. En la actualidad cuenta con 2.200 millones de euros de patrimonio propio y gestiona centros comerciales que ocupan en total una superficie de 600.000 metros cuadrados.
Oasiz es el primer proyecto levantado por el grupo francés en España. La apertura del centro comercial, en el que trabajan más de un millar de personas, estaba prevista para 2020, pero la crisis provocada por la pandemia obligó a retrasarla.